El itinerario: partiendo de la playa de S'Arenal Petit en Portinatx, primero nos dirigimos hacia el interior antes de seguir la costa hacia el oeste, deteniéndonos en playas como Benirrás y Puerto de San Miguel, con otras paradas en puntos de interés entre medias.
Lo que encontrarás: una costa impresionante, carreteras sinuosas rurales, aguas de color turquesa, lugares emblemáticos y paradas en boxes para comer.
Artículos imprescindibles que debes llevar: bebidas, tentempiés, una buena cámara, artículos de playa, música como nuestra lista de reproducción Ibiza Spotlight Selects, dinero en efectivo para bebidas en los bares, protector solar, mapa en papel/aplicación de mapas (lleva un cargador de teléfono si usas esta última).
La ruta
No hay duda de que el noroeste de Ibiza alberga algunos de sus paisajes más impresionantes. Desde hermosas calas y playas solitarias, aguas resplandecientes y colinas cubiertas de pinos hasta monumentos naturales y pueblos perfectos con fincas e iglesias encaladas, es una parte menos conocida de la isla que simplemente hay que explorar.
Los intrépidos viajeros de Ibiza Spotlight se lanzan a descubrir los numerosos encantos de la zona y te presentan sus lugares más destacados en un formato fácil que puedes seguir tú mismo.
Hicimos nuestro viaje por carretera desde la playa de Portinatx hasta el pueblo de Santa Angès en una sola tarde, pero fácilmente podrías pasar más tiempo ya que hay mucho por ver. Por lo tanto, te sugerimos que vayas a tu propio ritmo y te detengas en esos lugares que merecen más de tu tiempo.
Esperamos que disfrutes de nuestra guía de los tesoros del noroeste de Ibiza; sigue leyendo para conocer nuestra opinión e inspírate para diseñar tu propio viaje a través de este paisaje mágico.
Almuerzo en la playa
Después de recoger nuestro reluciente Jeep descapotable de manos de los amables muchachos de Autos Senna, comenzamos nuestro viaje por carretera desde el bullicioso y cercano centro turístico de Portinatx, en el municipio de San Juan. Sin embargo, antes de ponernos en marcha, visitamos una de las últimas incorporaciones a la escena gastronómica de la localidad, La Boca Junta.
Se trata de un restaurante de cocina asturiana (famosa por sus embutidos, fabadas y sidra). Con la promesa de traer los sabores de la costa cantábrica a las costas de Ibiza, el restaurante ofrece gastronomía marinera tradicional con un toque claramente asturiano e influencias internacionales.
Con el estómago saciado y el ánimo bien alto, emprendimos nuestro viaje por carretera. Desde Portinatx tomamos el camino viejo hacia el pueblo de San Juan. Esta maravillosa y ventosa carretera nos lleva por encima de las montañas, atravesando densos bosques de pinos.
Por el camino, se pueden ver los impresionantes muros de piedra seca que creaban los bancales para el cultivo de frutas y verduras en épocas anteriores. En el camino hay magníficas vistas del mar.
Tiempo de playa: “el dedo de Dios” y la cueva más famosa de Ibiza
Saliendo de San Juan, sin detenernos, pasamos justo por delante de la gasolinera, tomando la carretera de San Miguel. En pocos minutos llegamos a un cruce donde giramos de nuevo a la derecha hacia la playa de Benirrás. Otro paseo espectacular nos llevó hasta esta emblemática playa.
Junto a la playa hay varios aparcamientos grandes con bastante sombra. La playa de Benirrás es muy concurrida, con concesiones de sombrillas y tumbonas, un mercadillo hippie diario y varios chiringuitos y restaurantes. Numerosos veraneantes (familias en su mayoría) se agolpan en sus arenas y aguas de un azul brillante.
Mar adentro, se puede ver la roca que sobresale conocida localmente como "el dedo de Dios". Se puede nadar hasta ella y volver si eres buen nadador; si no, hay que ceñirse a la amplia zona acordonada frente a la playa, donde no hay barcos amarrados.
Vistas fascinantes y una cueva de contrabandistas
Tras refrescarnos en las azules aguas del Mediterráneo, nos ponemos de nuevo en marcha, esta vez por la estrecha carretera de San Miguel que bordea la costa. Una vez más, las vistas al mar desde aquí son impresionantes; seguro que te detendrás más de una vez para hacer fotos.
A medida que descendíamos al Puerto de San Miguel, pasamos por la entrada de la Cueva Can Marçà, una enorme cueva subterránea utilizada antiguamente por los contrabandistas; no te pierdas el show de música y luces para saber más sobre este espectáculo único. Aunque en esta ocasión no entramos, hicimos una parada para tomar algo en su cafetería y disfrutar de las vistas.
Desde la localidad del Puerto de San Miguel se puede tomar un desvío, en coche, en moto o a pie, hasta la torre mirador Torre des Molar, encaramada en lo alto de una colina.
El pino más célebre de la isla
De camino a nuestro próximo destino, el pequeño pueblo de San Mateo, no podíamos dejar de visitar el Pi ver d'en Besuró. Se trata de un magnífico pino real, situado en un campo de una pequeña carretera secundaria a un par de kilómetros de San Miguel.
Supuestamente el árbol más antiguo de la isla, mide doce metros de altura y su copa mide 25 metros de diámetro. Se necesitarían tres hombres, brazo con brazo, para abrazar su enorme tronco. Todos los años se celebran bajo él bailes tradicionales locales conocidos como ballada pagesa, como parte de las fiestas patronales del pueblo.
Continuamos por la carretera de San Mateo durante un kilómetro más o menos antes de girar a la derecha en el cruce hacia Es Portitxol. Justo antes de que la carretera se eleve a la derecha, giramos a la izquierda por la pequeña carretera de San Mateo. Sólo unos metros después del giro pasamos por Can Sulayetas, un popular restaurante rural (cerrado los lunes).
Viaje panorámico
Continuando hacia San Mateo, pasamos por algunas de las tierras de cultivo más pintorescas de la isla. Esta rica tierra roja es muy fértil, de ahí todos los viñedos y plantaciones de olivos de los alrededores.
Un pequeño pueblo con una imponente iglesia encalada (cuando la ves, puedes entender su propósito secundario como una fortaleza para los aldeanos cuando eran atacados por piratas en el pasado), San Mateo tiene poco que ver para los visitantes, aunque es el hogar de uno de nuestros restaurantes favoritos, Juntos House.
La pequeña carretera a Santa Agnès desde San Mateo es otra maravilla, serpenteando a través de algunos de los mejores paisajes de Ibiza, lejos del ajetreo y el bullicio de la costa. Es lo que los lugareños llaman "la Ibiza profunda", su lado más auténtico e intacto.
Llegamos a Santa Agnès en una de esas calurosas tardes típicas del pleno verano en la isla blanca. Por suerte, uno de los dos restaurantes del pueblo, Sa Palmera, estaba abierto, así que entramos a tomar un refresco y a charlar con los lugareños.
Las Puertas del Cielo y ruinas antiguas
Suficientemente refrescados, salimos por el pequeño camino que rodea el glorioso valle de Santa Agnès, hogar de los emblemáticos almendros de Ibiza. Pero por el camino no podíamos dejar de hacer un alto en el camino para admirar las espectaculares vistas de Las Puertas del Cielo.
Aquí se encuentran los restos de un antiguo asentamiento que se remonta a la época en que la isla estaba gobernada por los musulmanes. Aunque ahora sólo quedan los restos de algunas paredes, es un recordatorio del largo pasado de Ibiza y de las diferentes civilizaciones que han arraigado aquí.
El final del camino
A medida que caía la tarde, avanzamos en la última etapa de nuestro viaje hacia nuestro destino final, el elegante hotel de agroturismo Es Cucons, donde los no huéspedes son bienvenidos a tomar una copa o comer algo. Aquí disfrutamos de sus cuidados jardines en compañía de los huéspedes mientras tomábamos unos exquisitos cócteles (¡un cóctel sin alcohol para el conductor, por supuesto!), preparados por su amable coctelero.
Esperamos que disfrutes leyendo sobre nuestro road trip por el noroeste de Ibiza y que te inspire a hacer lo mismo.
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