Tras abrir sus puertas a finales de 2022 y desafiando los tranquilos meses de invierno, el restaurante japonés Okasan, situado en el puerto deportivo de San Antonio, está listo para afrontar su primera temporada de verano completa. El equipo de cocina ha tenido la oportunidad de afilar sus cuchillos, perfeccionar sus habilidades y refinar la carta, mientras que el equipo de atención al público es amable y agradable desde el momento en que te acercas por la calle.
Con un diseño contemporáneo y sofisticado que recuerda mucho al centro de la ciudad de Tokio u Osaka, el interior oscuro y minimalista de Okasan se calienta con el resplandor de la parrilla abierta de carbón Robata. En el exterior, la terraza está rodeada de plantas tropicales de bambú y aves del paraíso y ofrece una vista parcial del puerto y la bahía de San Antonio. La escena resulta especialmente cautivadora al atardecer.
Nos invitaron a que comprobáramos el desarrollo de los preparativos para el verano y descubriéramos algunos platos nuevos e inesperados. Si alguna vez has pasado por delante y te has preguntado qué ocurre en ese misterioso interior, deja que nuestra tentadora fotografía te ilumine.
Para empezar, el tradicional entrante de edamame, ¡pero ahora con deliciosa trufa!
Gloriosas gyozas rellenas de cerdo picante y kimchi.
Una excepcional ensalada de wakame y lichi, con crema de aguacate y pepino encurtido.
Tempura de gigantesco langostino tigre con salsa mirin y siracha deliciosamente picante.
Para los comensales veganos, las "costillas"' de maíz picante no contienen gluten y se asan en la parrilla Robata. Perfectas para mojar en un poco de mayonesa de kimchi.
Unas brochetas súper suculentas de ternera con salsa pico de gallo.
¡Un espectáculo! Las costillas de cerdo Okasan son una experiencia excepcionalmente agradable y representativa de la calidad que se ofrece aquí. Las costillas increíblemente suaves se han marinado en siete especias durante 10 horas y se han cocinado a fuego lento durante 8 en el horno. Por último, se rematan en la parrilla Robata. Increíblemente buenas.
Pronto se añadirá a la carta: miso de bacalao negro con setas enoki.
Una buena selección de rolls de sushi: aburi de salmón, Dragon Roll y atún picante.
Un gran final, la deliciosa tarta de queso Okasan. Con un fondant derretido de queso de Mahón curado e infusionado con té verde matcha, este postre ofrece una irresistible explosión de sal y dulzura para deleitar el paladar.
Obviamente, ninguna comida está completa sin algo del bar de cócteles. Tuvimos la suerte de probar un trío de especialidades de inspiración oriental. Thai Me Up con sake infusionado con albahaca tailandesa, Blueberry Spicy Mule con un toque de wasabi y un Whisky Sour con whisky Hatozaki.
Okasan es un auténtico placer para los amantes de la cocina asiática, y en particular, de la japonesa. Se nota la calidad de la elaboración y el cariño que se ha puesto en cada plato. Que puedan hacerlo por los precios de la carta puede que te sorprenda más que cualquier otra cosa.
