La Cala San Vicente se encuentra en el extremo noreste de Ibiza. Popular entre familias, es una pequeña localidad turística que atrae a una mezcla de clientela internacional.
La playa tiene una arena dorada y fina, es ancha y está poco masificada. Hay un paseo marítimo bien cuidado que discurre desde un extremo de la playa al otro. Tanto si la observas desde el mirador del acantilado en la carretera desde San Carlos o desde el propio paseo, el agua en la Cala San Vicente es de un color azul deslumbrante.
El paseo, adornado con palmeras, arbustos en flor y enebros retorcidos con formas llamativas por los vientos del noreste que soplan todo el año, alberga varios restaurantes y tiendas de souvenirs, así como un pequeño supermercado, donde puedes comprar un pícnic para la playa. En la localidad, también hay un par de tiendas que venden ropa de playa y accesorios.
El mar puede estar picado, sobre todo durante el día cuando hay una brisa que viene del mar hacia tierra. La señalización es excelente con mapas que muestran la zona de baño, el entorno local, como la presencia de posidonia, y rutas de senderismo (algunos de los mejores caminos de la isla en encuentran en los alrededores).
Chiringuitos y restaurantes
La oferta gastronómica de la localidad es muy variada. En el paseo, hay varios restaurantes típicos ibicencos que sirven platos de pescado, carne y marisco. En el extremo derecho de la localidad, mirando al mar, hay dos restaurantes de comida saludable y de alta cocina internacional.
Según llegas a la pequeña rotonda del paseo marítimo, encontrarás otros restaurantes más pequeños, incluida una pizzería y una heladería. En los pueblos cercanos, encontrarás más restaurantes que de cocina tradicional e internacional.
Playa y deportes acuáticos
En el extremo izquierdo de la playa, donde se ven las casetas de los pescadores, se pueden alquilar kayaks y tablas de surf de remo. También se pueden alquilar barcos sin licencia; busca el pequeño cartel hacia el extremo derecho del paseo.
Cómo llegar
La Cala San Vicente está conectada con el resto de la isla mediante dos rutas de autobuses, una a Santa Eulalia y la otra, a San Juan. La mayoría de los excursionistas llegan aquí en coche de alquiler. Hay mucho espacio para aparcar (alguno asfaltado, otro sin asfaltar) en los aparcamientos situados a ambos extremos de la localidad.
Alojamiento cercano
Hay algunos hoteles justo detrás de la playa. Otra alternativa sería vivir el sueño de alojarse en alguna de las bonitas viviendas vacacionales cercanas de Ibiza.