Fiesta 50 aniversario de Pacha | Pacha | Segunda parte

Solomun y Marco Carola atraen a las multitudes, pero Bedouin se lleva el espectáculo.

Cincuenta gloriosos años de Pacha Ibiza, menudo viaje. Una ocasión así requiere una fiesta. Naturalmente. Estamos en Ibiza, ¿qué más propones?

Adorada en toda la isla y reconocida mundialmente con semejante legado, la fiesta del 50 aniversario de Pacha tendría que estar a la altura de la ocasión, ¿verdad?

Las fiestas que llevan semejante carga a veces pueden colapsar bajo el propio peso de sus expectativas. Por ejemplo, aunque no sea una opinión compartida con todos mis compañeros, este escritor siente que la última Closing Party de Space de la historia no estuvo a la altura de los cierres de Space de años anteriores.

Con la venta anticipada finalizada hace semanas, el pronóstico apuntaba a una noche histórica. El hecho de que dos de las estrellas más importantes de Pacha, Solomun y Marco Carola, actuasen juntos por primera vez, añadía aún más prestigio a la noche.

Reconociendo la majestuosidad de la ocasión, el público estuvo a la altura de la notoriedad, creando una ferviente pista de baile desde el primer momento, mientras los clubbers se agolpaban en el interior desde que se abrieron las puertas abiertas. Realmente cumplieron con su parte del trato. El ambiente era tan bueno como el de cualquier otra noche de discoteca que yo recuerde.

Pacha's 50th Anniversary Party by Raul Sanchez

Aquí puedes ver Pacha bailando, haciendo cabriolas y pavoneándose en todo su esplendor.

No cabe duda de que los miles de asistentes se sintieron atraídos principalmente por la aparentemente incompatible unión de Solomun y Marco Carola, si es que no eran la excusa principal para celebrar la fiesta en sí. El dúo, quizás extraños compañeros de cama, cumplió con su cometido. Sin embargo, habría sido injusto no involucrar de alguna manera a Bedouin, los anfitriones habituales de los miércoles.

Ante una pista de baile abarrotada para su warm-up, Rami y Tamer aprovecharon la oportunidad que se les presentaba para dejar a todo el mundo boquiabierto. Llamarlo de otra manera que no sea una de las sesiones más destacadas del verano, sería hacerle un flaco favor.

Hubo música que hacía referencia a su herencia del Medio Oriente, junto con música de baile más robusta y moderna, como The Fall de Raxon, Explorer de Mind Against y un viejo favorito de Pacha, Bad Kingdom de Moderat y DJ Koze.

Para cuando terminaron, la pista de baile estaba lista y el escenario preparado para que los dos ídolos de la música de baile tomaran el control.

Pacha's 50th Anniversary Party by Raul Sanchez


En algunos aspectos, Saga pasa criminalmente desapercibida en comparación con fiestas de mayor visibilidad. Sin embargo, el público que se reúne todos los miércoles por la noche lo hace sabiendo que le espera un regalo musical.

De la misma manera que lo hizo Solomun, y tal vez también Carola, parece que Bedouin se ha convertido también en sinónimo de Pacha. Ahora es una discoteca que influye en su sonido.

Con su álbum de debut Temple Of Dreams a punto de recibir una serie de remezclas listas para la discoteca, Bedouin parece estar entrando en la siguiente fase de su carrera. La fiesta del 50 aniversario de Pacha podría ser el catalizador para impulsarlos a un nivel superior.

Pacha's 50th Anniversary Party by Raul Sanchez

Prepárate para la versión de Vintage Culture de Tijuana que se lanzará a fines de este mes, que ha estado causando estragos en Saga y que ha vuelto a incendiar la pista de baile de Pacha esta noche. Otro remix con un tempo más acelerado de Coldman a tener en cuenta.


¡Feliz 50 cumpleaños, Pacha! Puede que se hable de esta noche como la ocasión en que Solomun y Carola se unieron por primera vez. Pero para mí, será la noche en que Bedouin les robó el espectáculo.

Las entradas para las nueve fechas restantes en el calendario de Saga se pueden comprar a continuación, incluida la próxima semana, cuando Seth Troxler y DJ Tennis son los invitados de peso. Pero no esperes que eclipsen a los anfitriones.

FOTOGRAFÍA | por Raúl Sánchez

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