INFORMACIÓN ESENCIAL
¿Por qué ir? Para comer como un lugareño
¿Qué tipo de comida es? Abundante y tradicional
¿A qué estómagos atiende? A aquellos con un gran apetito. Principalmente sirven carnes y pescados, aunque también hay algo para los vegetarianos, especialmente si eres amante de las verduras.
Consejo de Ibiza Spotlight. Decántate por uno de sus menús cerrados, que ofrecen una excelente calidad/precio.
El lugar
Entre los muchos restaurantes de Santa Eulalia, este es una verdadera joya. Ca Na Ribes es uno de los restaurantes más antiguos de la isla que abrió por primera vez en 1926. Incluso hay una foto en la pared de los fundadores, los tatarabuelos de la encantadora y hospitalaria Eva que dirige el negocio hoy.
Años de tradición se han ido transmitiendo: las raciones abundantes, los alimentos de alta calidad del mercado local y unos platos de tradición ibicenca y nacional son los pilares de Ca Na Ribes. En su cocina también encontrarás toques modernos, gustosos y creativos para el deleite de tu estómago.
Hay una terraza exterior, un patio interior repleto de macetas y enredaderas y una larga sala entremedias, todo ello decorado con un encantador estilo rústico. Aquí puedes comer como lo hacen los lugareños y descubrir un mundo que no encontrarás en ninguno de tus viajes.
el ambiente
Ca na Ribes es un lugar magnífico si quieres evitar a los turistas en masa, con un ambiente familiar y acogedor. Con un personal más maduro que en la mayoría de los lugares, aquí toparás con personas que saben bien lo que hacen. Para ellos atender a los clientes, desde cocinar hasta servir mesas, es una profesión y la hacen bien.
Este restaurante es una máquina bien engrasada, y todo con la intención de hacer que tu experiencia sea como sentirte en casa, incluso cuando está lejos. Aquí se trata de autenticidad sin pretensiones. Si tú también eres así, este es tu restaurante.
La comida
Croquetas de pollo con mermelada de tomate
Además de un menú a la carta, también hay un menú de tapas aparte y tres menús cerrados diferentes a buen precio, que te permiten comer un poco de todo. Entre ellos, un menú de tapas, que facilita la elección, un menú de paella con entrantes tradicionales y un menú del chef que te lleva en un viaje a través de la carta principal.
Entonces, ¿qué comimos? Para mí, tenían que ser croquetas para empezar. Sólo los españoles saben cómo hacerlas bien. Sabían sabrosamente a pollo, acompañadas de una mermelada de tomate que conserva el sabor real de los tomates, a diferencia del ketchup.
Finas rodajas de berenjena a la plancha, queso de cabra y cebolla caramelizada
Uno mis dos compañeros de mesa, Pete, pidió el gratinado de vieiras frescas con langostinos, un plato delicioso aunque un poco simple, parecido a una fondue de mariscos. María optó por un plato del menú de tapas: unas tostadas de pan cubiertas por berenjena cortada en rodajas finas, queso de cabra y cebolla caramelizada.
Dorada a la sal con un aderezo espectacular
Nuestros platos principales fueron una buena mezcla de carne, pescado y ensalada. Yo me decanté por la paletilla de cordero asada con romero, muy tierna. Si te gustan los platos cocinados a fuego lento y con un sabor intenso, este es tu plato.
El plato fuerte en cuanto a presentación fue la dorada a la sal servida con verduras mediterráneas asadas. Se trata de un pescado entero que te traen en una gran bandeja de servir y Pete, cuyo plato era este, parecía asombrado. No supimos de él durante un buen rato; y por cierto, el veredicto fue que estaba increíble.
Una melosa y sabrosa paletilla de cordero al romero
Las ensaladas aquí son enormes, de hecho todas las porciones son muy generosas, así que ten cuidado al elegir. Pide una ensalada de primero y luego un plato principal y tendrán que sacarte de Ca Na Ribes en una pequeña grúa. María eligió una ensalada de anchoas que viene sobre una cama de lechuga, berros y rúcula con queso manchego, aceitunas y salsa de alcaparras. Si quieres comer sano y saciarte, este tipo de plato es perfecto. No hay nada peor que irse de un restaurante con hambre. Aquí puedes estar tranquilo.
Una gran porción de tarta de queso
Nos las arreglamos para hacer hueco para algunos postres. Los hacen algunos de los mejores pasteleros y reposteros de Ibiza, así que realmente tienes que darte el gusto. Pete tomó una deliciosa tarta de queso al horno recubierta de frambuesa y acompañada de helado de vainilla, la mejor variedad de este tipo de postre, en mi opinión. María tomó una crema Catalana, una crema pastelera untuosa que está para morirse, y yo me decanté por la greixonera, un postre local muy tradicional tipo pudin, aderezado con canela y naranja. Es un postre destacado y yo lo como muy a menudo. Solo hay que ver como me está creciendo la barriga...
Ca Na Ribes es un restaurante delicioso. Si eres un glotón, no olvides ponerte unos pantalones holgados. De cualquier manera, ve con apetito y ya verás como sales de allí con un destello de felicidad en los ojos.
